Casa de la Cascada |
Aunque
encontramos una excepción en
la arquitectura de Frank Lloyd Wright, considerado
uno de los principales exponentes de la arquitectura del siglo XX,
que desde los inicios de su carrera se decantó por el diseño de
viviendas unifamiliares integradas en la naturaleza.
Considerado
como el precursor de la arquitectura orgánica, en
la que se busca una armonía entre el hombre y la naturaleza, sus
viviendas se caracterizan por crear espacios internos que se unen con
los externos, naturaleza.
Un ejemplo de esta arquitectura es la casa de la cascada, Falling Water House, encargada en 1935 por Edgar Kaufmann, dueño de unos grandes almacenes en Pittsburg, como casa de vacaciones.
Se
construyó sobre una pequeña cascada del río Bear Run en
Pensilvania y fue considerada como
la obra más importante de la carrera de Wright y la mejor
obra de la arquitectura estadounidense de la historia por
el American Institute of Architects.
Interior |
La
casa, hoy en día un museo del Western Pennsylvania
Conservancy, se divide en tres
plantas escalonadas, diseñadas en función de las necesidades de
su propietario. La planta
principal está formada por una gran sala de estar centrada en la
chimenea, rodeada de piedras naturales, y la cocina, mientras que en
el segundo piso se disponen dos habitaciones, los baños y el
despacho del señor Kaufmann. En la tercera planta se construyó un
mirador.
Es
la única casa diseñada por Wright que está abierta al público y
se muestra con su mobiliario original, diseñado también por el
propio arquitecto.