Ámbar y espuma (1898) R. Casas |
Desde
el 6 de julio y hasta el 22 de octubre la Obra Social la Caixa,
junto con el Consorci del
Patrimoni de Sitges y el Museu Nacional d'Art de Catalunya presentan
en el CaixaForum de
Palma la exposición Ramon Casas. La modernidad anhelada.
La
exposición se enmarca en las celebraciones del 150 aniversario del
nacimiento de Ramon Casas (1866-1932), un
pintor avanzado a su tiempo, bohemio, irreverente y socarrón que se
convirtió en un referente del Modernismo catalán de finales del
siglo XIX y principios del XX.
En
ella se hace un recorrido por la obra del pintor relacionándola con
los artistas de su misma época que le influenciaron y por los que se
reflejaron en su obra, como Julio Romero de Torres, Joaquín Sorolla,
Joaquín Torres García, Pablo Picasso o Santiago Rusinyol.
Ramon Casas velocipedista (1899), S. Rusinyol |
Se
reúnen una selección de 88 obras entre las cuales hay realizaciones
del artista en diferentes formatos, pinturas, dibujos y carteles,
obras de artistas contemporáneos como Picasso y su gran amigo
Santiago Rusinyol y 40 fotografías de la época, que ayudan a
enmarcar su obra dentro del contexto social y cultural del momento en
el que vivió.
La
gran mayoría de estas obras provienen de colecciones privadas,
aunque también encontramos prestamos de museos españoles y
extranjeros como el Museo de Bellas Artes de Burdeos, el Museo
Picasso de Barcelona, el Museo de Bellas Artes de Bilbao o el de
Córdoba.
Éstas
se agrupan en cinco ámbitos temáticos, en un recorrido que se
plantea como un juego de espejos, un camino de doble sentido que
permite visualizar las influencias, analogías e intereses comunes
que existieron entre Casas y otros autores contemporáneos.
Interior del Moulin de la Galette (1890-91) R. Casas |
En
el primero de ellos, La construcción de una identidad artística,
se muestran los inicios de su carrera como pintor marcada por su
decisión de viajar a París con 15 años, una ciudad que marcaría
su obra y donde empezó a pintar retratos y autorretratos.
En
La pulsión bohemia se profundiza en la relación del artista
con la vida bohemia de Barcelona, en especial con la cervecería Els Quatre Gats que siguió el modelo parisino de Le Chat Noir y
para el que Casas realizó numerosos carteles, que se exponen junto a
otros realizados para diferentes marcas de bebidas.
En
La paradoja del artista moderno se
nos presenta la atracción de Casas por la temática popular, en
especial por las escenas taurinas o tipologías de majas y toreros,
unas representaciones alejadas de las corrientes pictóricas
internacionales de las que Casas era seguidor y referente.
En
La poética de la
multitud se muestra la
obra Salida de la
procesión de Corpus de la iglesia de Santa María que
formó parte de una serie
de composiciones
dedicadas a la denominada pintura de crónica social en las que se
deja ver la influencia de la fotografía, especialmente en el uso de
un encuadre fragmentario y un marco visual abierto que insinúa una
acción continuada.
Salida de la procesión del corpus de la iglesia de Santa María (1896-98) R. Casas |
Por
último en Identidades ambivalentes se muestra su habilidad
para el retrato, en especial el femenino. Entre las obras expuestas
aparecen mujeres sofisticadas y elegantes, mujeres representadas en
momentos íntimos y una serie de desnudos femeninos que Casas realizó
durante la década de 1890 y en los que también se percibe la
influencia de la fotografía.